Callada. Sábanas mudas.
Entreabierta en la almohada.
El sueño con su marfil
la cabellera peinaba.
El labio duerme. No dice
lo que supieron las alas.
Entre las aguas del sueño,
sirena leda, se salva.
¿Qué blanco corcel de espuma
impidió que se anegara?
La está guardando el silencio.
Callan el eco y las auras
Luis Cernuda: Perfil del aire (1927)
Versións:
Joselito Vélez: ¡Qué blanco corcel de espuma!*; Caballo, hombre, cartón; 1987; Lado 1, Corte 1
*[A versión musical de Joselito Vélez está seguido de dúas estrofas do poema Va la brisa reciente, da obra de Luis Cernuda: Primeras poesías (1924-1927), do ano 1936, da primeira estrofa do poema La fuente que se ha roto, da obra de Luis Cernuda: Perfil del aire, do ano 1927 e, de dúas estrofas do poema El amor mueve al mundo, da obra de Luis Cernuda: Primeras poesías (1924-1927), do ano 1936.]
jueves, 30 de enero de 2025
viernes, 24 de enero de 2025
Un español habla de su tierra
Las playas, parameras
Al rubio sol durmiendo,
Los oteros, las vegas
En paz, a solas, lejos;
Los castillos, ermitas,
Cortijos y conventos,
La vida con la historia,
Tan dulces al recuerdo,
Ellos, los vencedores
Caínes sempiternos,
De todo me arrancaron.
Me dejan el destierro.
Una mano divina
Tu tierra alzó en mi cuerpo
Y allí la voz dispuso
Que hablase tu silencio.
Contigo solo estaba,
En ti sola creyendo;
Pensar tu nombre ahora
Envenena mis sueños.
Amargos son los días
De la vida, viviendo
Sólo una larga espera
A fuerza de recuerdos.
Un día, tú ya libre
De la mentira de ellos,
Me buscarás. Entonces
¿Qué ha de decir un muerto?
Luis Cernuda: Las nubes (1940)
Versións:
Paco Ibáñez: Un español habla de su tierra; Concierto en el Teatro de la Comedia de Madrid; 1968; Pista 11
Paco Ibáñez: Un español habla de su tierra; Concierto en el Teatro de la Ópera de Buenos Aires; 1971; CD2, Pista 10
Paco Ibáñez: Un español habla de su tierra; Concierto en los estudios de la RTSI; 1980; Pista 5
Paco Ibáñez: Un español habla de su tierra; En vivo, en Obras Sanitarias (Argentina); 1985; Pista 6
Paco Ibáñez: Un español habla de su tierra; Paco Ibáñez en el Olympia de París; 1989; Pista 21
Paco Ibáñez: Un español habla de su tierra; Concierto en el Palau de la Música de Barcelona; 2002; Pista 18
Paco Ibáñez: Un español habla de su tierra; Les concerts de Paco Ibáñez á París; 2002; Pista 6
Paco Ibáñez: Un español habla de su tierra; Canta a los poetas andaluces; 2008; CD2, Pista 8
Al rubio sol durmiendo,
Los oteros, las vegas
En paz, a solas, lejos;
Los castillos, ermitas,
Cortijos y conventos,
La vida con la historia,
Tan dulces al recuerdo,
Ellos, los vencedores
Caínes sempiternos,
De todo me arrancaron.
Me dejan el destierro.
Una mano divina
Tu tierra alzó en mi cuerpo
Y allí la voz dispuso
Que hablase tu silencio.
Contigo solo estaba,
En ti sola creyendo;
Pensar tu nombre ahora
Envenena mis sueños.
Amargos son los días
De la vida, viviendo
Sólo una larga espera
A fuerza de recuerdos.
Un día, tú ya libre
De la mentira de ellos,
Me buscarás. Entonces
¿Qué ha de decir un muerto?
Luis Cernuda: Las nubes (1940)
Versións:
Paco Ibáñez: Un español habla de su tierra; Concierto en el Teatro de la Comedia de Madrid; 1968; Pista 11
Paco Ibáñez: Un español habla de su tierra; Concierto en el Teatro de la Ópera de Buenos Aires; 1971; CD2, Pista 10
Paco Ibáñez: Un español habla de su tierra; Concierto en los estudios de la RTSI; 1980; Pista 5
Paco Ibáñez: Un español habla de su tierra; En vivo, en Obras Sanitarias (Argentina); 1985; Pista 6
Paco Ibáñez: Un español habla de su tierra; Paco Ibáñez en el Olympia de París; 1989; Pista 21
Paco Ibáñez: Un español habla de su tierra; Concierto en el Palau de la Música de Barcelona; 2002; Pista 18
Paco Ibáñez: Un español habla de su tierra; Les concerts de Paco Ibáñez á París; 2002; Pista 6
Paco Ibáñez: Un español habla de su tierra; Canta a los poetas andaluces; 2008; CD2, Pista 8
miércoles, 22 de enero de 2025
Los límites
Puedes dejar que caigan
en ti y se disuelvan
los blancos días quietos
los saludos, las cartas
el sabor previsible de las horas que quedan.
Cada mañana el viento
trae sonidos, pasos
conversaciones fáciles
conocidos reflejos
en la luz de estos días podemos apoyarnos.
Pero que hemos de hacer
—no puedes, no podemos—
recibir totalmente cierto infinito peso
la hondura desmedida
el golpe inesperado.
Por pedazos, pequeños fragmentos dolorosos
se reciben entonces
como la lluvia en gotas
como la hoguera en chispas
para no aniquilarnos.
Circe Maia: Presencia diaria (1964)
Versións:
Circe Maia: Los límites; Circe Maia por ella misma; 1970; Lado A, Corte 4
en ti y se disuelvan
los blancos días quietos
los saludos, las cartas
el sabor previsible de las horas que quedan.
Cada mañana el viento
trae sonidos, pasos
conversaciones fáciles
conocidos reflejos
en la luz de estos días podemos apoyarnos.
Pero que hemos de hacer
—no puedes, no podemos—
recibir totalmente cierto infinito peso
la hondura desmedida
el golpe inesperado.
Por pedazos, pequeños fragmentos dolorosos
se reciben entonces
como la lluvia en gotas
como la hoguera en chispas
para no aniquilarnos.
Circe Maia: Presencia diaria (1964)
Versións:
Circe Maia: Los límites; Circe Maia por ella misma; 1970; Lado A, Corte 4
sábado, 18 de enero de 2025
Un cielo para Ramona
No sé si un cielo, exactamente un cielo,
pero me ha de gustar que no quede en la nada
esa madre de Dios, doña Ramona
que ha muerto en Santander, como si nada.
Porque la nada es lo que no merece
quién vivió de dar todo y entregarlo
en la mesa coral de la ternura
para sus hijos suramericanos.
Y los de muy su tierra y muy su sangre
y los de lejos y los entenados
que arribábamos, pálidos de ausencia,
a su mesa coral, tras los naufragios
donde la muerte había aborrecido
nuestra dolida índole de pájaros.
Pero ella no sabía. Si sabía
no quería acordarse de las lágrimas
y servía el cocido a medio día
en lo más festival de cada plato,
poniéndole un refrán a la alegría
y todavía alegre de acordarse.
Porque éramos sus nietos, los de América,
los niños castigados del milagro,
que volvíamos, sucios de la vida,
de habitar cinco siglos de su sangre.
Yo quiero un cielo, exactamente un cielo,
para la mi Ramona y la mi madre
que ha muerto en Santander de cielo y sopa
mientras me bebo a Dios en esta lágrima.
Cómo no va a tener Ramona un justo cielo?
Cómo es que Dios no va a borrar la nada?
Buenos Aires, 1979
Armando Tejada Gómez: Bajo estado de sangre (1974-1983) (1986)
Versións:
Armando Tejada Gómez: Un cielo para Ramona; Vigencia; 2005; CD3: Registros inéditos; Pista 18
*[Por razóns de espazo coas etiquetas de blogger, nunha entrada anterior etiquetouse a Armando Tejada Gómez, intérprete, como Tejada; respectamos a etiqueta actual para evitar duplicidades.]
pero me ha de gustar que no quede en la nada
esa madre de Dios, doña Ramona
que ha muerto en Santander, como si nada.
Porque la nada es lo que no merece
quién vivió de dar todo y entregarlo
en la mesa coral de la ternura
para sus hijos suramericanos.
Y los de muy su tierra y muy su sangre
y los de lejos y los entenados
que arribábamos, pálidos de ausencia,
a su mesa coral, tras los naufragios
donde la muerte había aborrecido
nuestra dolida índole de pájaros.
Pero ella no sabía. Si sabía
no quería acordarse de las lágrimas
y servía el cocido a medio día
en lo más festival de cada plato,
poniéndole un refrán a la alegría
y todavía alegre de acordarse.
Porque éramos sus nietos, los de América,
los niños castigados del milagro,
que volvíamos, sucios de la vida,
de habitar cinco siglos de su sangre.
Yo quiero un cielo, exactamente un cielo,
para la mi Ramona y la mi madre
que ha muerto en Santander de cielo y sopa
mientras me bebo a Dios en esta lágrima.
Cómo no va a tener Ramona un justo cielo?
Cómo es que Dios no va a borrar la nada?
Buenos Aires, 1979
Armando Tejada Gómez: Bajo estado de sangre (1974-1983) (1986)
Versións:
Armando Tejada Gómez: Un cielo para Ramona; Vigencia; 2005; CD3: Registros inéditos; Pista 18
*[Por razóns de espazo coas etiquetas de blogger, nunha entrada anterior etiquetouse a Armando Tejada Gómez, intérprete, como Tejada; respectamos a etiqueta actual para evitar duplicidades.]
sábado, 11 de enero de 2025
Los formales y el frío
Quién iba a prever que el amor ese informal
se dedicara a ellos tan formales
mientras almorzaban por primera vez
ella muy lenta y él no tanto
y hablaban con sospechosa objetividad
de grandes temas en dos volúmenes
su sonrisa la de ella
era como un augurio o una fábula
su mirada la de él tomaba nota
de cómo eran sus ojos los de ella
pero sus palabras las de él
no se enteraban de esa dulce encuesta
como siempre o como casi siempre
la política condujo a la cultura
así que por la noche concurrieron al teatro
sin tocarse una uña o un ojal
ni siquiera una hebilla o una manga
y como a la salida hacía bastante frío
y ella no tenía medias
sólo sandalias por las que asomaban
unos dedos muy blancos e indefensos
fue preciso meterse en un boliche
y ya que el mozo demoraba tanto
ellos optaron por la confidencia
extra seca y sin hielo por favor
cuando llegaron a su casa la de ella
ya el frío estaba en sus labios los de él
de modo que ella fábula y augurio
le dio refugio y café instantáneos
una hora apenas de biografía y nostalgias
hasta que al fin sobrevino un silencio
como se sabe en estos casos es bravo
decir algo que realmente no sobre
él probó sólo falta que me quede a dormir
y ella probó por qué no te quedás
y él no me lo digas dos veces
y ella bueno por qué no te quedás
de manera que él se quedó en principio
a besar sin usura sus pies fríos los de ella
después ella besó sus labios los de él
que a esa altura ya no estaban tan fríos
y sucesivamente así
mientras los grandes temas
dormían el sueño que ellos no durmieron
Mario Benedetti: De otros diluvios. Poemas de otros (1974)
Versións:
Mario Benedetti: Los formales y el frío; A dos voces, Vol.2; 1987; Cara B, Corte 7
Estela Castro: Los formales y el frío; Poemas de Mario Benedetti; 1989; Lado 1, Corte 1
Mario Benedetti: Los formales y el frío / Antojo; A dos voces, Vol.1 e 2; 1994; Pista 16
Mario Benedetti: Los formales y el frío; El amor, las mujeres y la vida; 1995; Pista 17
Mario Benedetti: Los formales y el frío; Poesía con los jóvenes; 1998; Pista 12
Mario Benedetti: Los formales y el frío; Inventario (1950-1975); 2002; Pista 36
(Reedición da versión do disco El amor, las mujeres y la vida, do ano 1995.)
Mario Benedetti: Los formales y el frío; Poesía con los jóvenes; 2009; Pista 12
(Reedición da versión do disco Poesía con los jóvenes, do ano 1998.)
Estela Castro: Los formales y el frío; Poemas de Mario Benedetti; 2010; Pista 1
(Remasterización da versión do disco Poemas de Mario Benedetti, do ano 1989.)
se dedicara a ellos tan formales
mientras almorzaban por primera vez
ella muy lenta y él no tanto
y hablaban con sospechosa objetividad
de grandes temas en dos volúmenes
su sonrisa la de ella
era como un augurio o una fábula
su mirada la de él tomaba nota
de cómo eran sus ojos los de ella
pero sus palabras las de él
no se enteraban de esa dulce encuesta
como siempre o como casi siempre
la política condujo a la cultura
así que por la noche concurrieron al teatro
sin tocarse una uña o un ojal
ni siquiera una hebilla o una manga
y como a la salida hacía bastante frío
y ella no tenía medias
sólo sandalias por las que asomaban
unos dedos muy blancos e indefensos
fue preciso meterse en un boliche
y ya que el mozo demoraba tanto
ellos optaron por la confidencia
extra seca y sin hielo por favor
cuando llegaron a su casa la de ella
ya el frío estaba en sus labios los de él
de modo que ella fábula y augurio
le dio refugio y café instantáneos
una hora apenas de biografía y nostalgias
hasta que al fin sobrevino un silencio
como se sabe en estos casos es bravo
decir algo que realmente no sobre
él probó sólo falta que me quede a dormir
y ella probó por qué no te quedás
y él no me lo digas dos veces
y ella bueno por qué no te quedás
de manera que él se quedó en principio
a besar sin usura sus pies fríos los de ella
después ella besó sus labios los de él
que a esa altura ya no estaban tan fríos
y sucesivamente así
mientras los grandes temas
dormían el sueño que ellos no durmieron
Mario Benedetti: De otros diluvios. Poemas de otros (1974)
Versións:
Mario Benedetti: Los formales y el frío; A dos voces, Vol.2; 1987; Cara B, Corte 7
Estela Castro: Los formales y el frío; Poemas de Mario Benedetti; 1989; Lado 1, Corte 1
Mario Benedetti: Los formales y el frío / Antojo; A dos voces, Vol.1 e 2; 1994; Pista 16
Mario Benedetti: Los formales y el frío; El amor, las mujeres y la vida; 1995; Pista 17
Mario Benedetti: Los formales y el frío; Poesía con los jóvenes; 1998; Pista 12
Mario Benedetti: Los formales y el frío; Inventario (1950-1975); 2002; Pista 36
(Reedición da versión do disco El amor, las mujeres y la vida, do ano 1995.)
Mario Benedetti: Los formales y el frío; Poesía con los jóvenes; 2009; Pista 12
(Reedición da versión do disco Poesía con los jóvenes, do ano 1998.)
Estela Castro: Los formales y el frío; Poemas de Mario Benedetti; 2010; Pista 1
(Remasterización da versión do disco Poemas de Mario Benedetti, do ano 1989.)
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