domingo, 22 de septiembre de 2019

Los campesinos

Los campos heridos de tanta metralla,
los pueblos sangrantes de tanto dolor,
y los campesinos sobre la batalla,
para destrozar al fascismo traidor.

Dejando el arado tirado en la tierra,
tomando el fusil para pelear,
marchamos alegres hacia las trincheras,
para que en España haya libertad.

Somos los campesinos,
hoy somos los soldados.
¡Adelante!
Gritan nuestros fusiles,
gritan nuestros arados.
¡Adelante!
¡Adelante! ¡Adelante!

La sangre que corre valiente a diario
ha de ahogar un día en su tempestad
a los enemigos del proletariado,
y a los enemigos de nuestra unidad.

Ya llegará el día de nuestra victoria;
la Paz por el mundo se paseará,
talleres y campos cantando la gloria
de los que cayeron por la libertad.

Antonio Aparicio*: Corazón sin descanso (poesía reunida) (2004)**

Versións:
Juan & José: El ejército del Ebro / Los campesinos***; Streik!; 1969; Cara A, Corte 1



*[Este poema de Antonio Aparicio foi escollido como «Himno da 46ª División do Ejército Popular Republicano Español». Púsolle música Enrique Casal Chapí, en Madrid, en 1937. Recollido por Carlos Palacio: Colección de canciones de Lucha, febrero de 1939.]
**[Publicado inicialmente no periódico Al Ataque, nº 25, no ano 1937. Aparece recollido tamén en Romancero general de la Guerra de España, Madrid-Valencia, Eds. Españolas, 1937. Antonio Aparicio: Corazón sin descanso (poesía reunida); Edic. de Sol Aparicio de Léger e José María Barrera López; Biblioteca del Exilio; Editorial Renacimiento; Sevilla, 2004; ISBN 84-8472-120-5.]
***[A versión musical de Juan & José está precedida pola canción El ejército del Ebro, popularizada polos soldados do bando republicano durante a Guerra Civil Española, sobre a canción ¡Ay, Carmela!, composta a comenzos do século XIX e interpretada polos soldados españois que loitaron contra a invasión francesa durante a Guerra da Independencia Española.]

sábado, 21 de septiembre de 2019

Remansillo

Me miré en tus ojos
pensando en tu alma.

Adelfa blanca.

Me miré en tus ojos
pensando en tu boca.

Adelfa roja.

Me miré en tus ojos.
¡Pero estabas muerta!

Adelfa negra.

Federico García Lorca: Primeras canciones (1921-1932) (1936)

Versións:
Daniel Viglietti: Canciones: Remansillo; Canciones para el hombre nuevo; 1967; Lado B, Corte 3b



Daniel Viglietti: Canciones: Remansillo; Canciones para mi América; 1968; Lado B, Corte 2a

(Reedición da versión do disco Canciones para el hombre nuevo, do ano 1967.)

martes, 3 de septiembre de 2019

Lo que yo maldigo

     Querría yo, por un feliz encanto,
dejar el circo infame de la Tierra
y huir a mundos de apacibles seres
sin los rojos instintos de la fiera.

     Donde palomas y aves de rapiña
en amigable comunión vivieran,
donde jamás el diente de los tigres
rasgara el corazón de las gacelas.

     Cansado estoy de crímenes y sangre,
de mirar en el hombre y en la bestia,
la inmolación salvaje del vencido,
la victoria del mal y de la fuerza.

     Ante el inicuo drama de la vida
mi justiciero corazón protesta;
perdono mis dolores, no perdono
la universal crucifixión eterna.

     ¿Por qué mis ojos para ver los males
y mis oídos para oír las quejas?
¿Por qué no soy el leño ni el peñasco,
dormidos en la paz de la inconsciencia?

     ¿Por qué venir a lamentar horrores
en un oscuro y trágico planeta?
¡Maldito el ciego antojo de la vida
que por morada me otorgó la Tierra!

Manuel González Prada: Exóticas (1911)

Versións:
Juan Luis Dammert e Jessica Ballón: Lo que yo maldigo; El cancionero de los poetas (VVAA); 1994; Pista 10