Dejadme en el jardín fragante, porque quiero
ver el sol en el agua blanca de mariposas;
pues si esta tarde de oro pasa el frío y me muero,
me llevaré mi alma toda llena de rosas…
Ahora que están mis ojos llenos de luz florida,
por Dios, dejadme solo; mi carne es poco fuerte;
quiero oir lo que dice la brisa de la vida
y tan poco jardín de la vida a la muerte…
Juan Ramón Jiménez: Elegías puras (1908)
Versións:
Carmen Linares: Dejadme en el jardín fragante; Raices y alas; 2008; Pista 2
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
No hay comentarios :
Publicar un comentario