Tus ojos se me van
de mis ojos y vuelven
después de recorrer
un páramo de ausentes.
Tu boca se me marcha
de mi boca y regresa
con varios besos muertos
que aún baten, que aún quisieran.
Tus brazos se desploman
en mis brazos y ascienden
retrocediendo ante esa
desolación que sientes.
Otoño de tu cuerpo,
aún mi calor lo vence.
Miguel Hernández: Cancionero y romancero de ausencias (1938-1941) (1958)
Versións:
Paco Damas e Luis Eduardo Aute: Tus ojos se me van; Tristes guerras; 2009; Pista 3
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